1 / Tus miedos se confirman: no la vas a encontrar
Puede que suene fuerte, pero la aplicación de notas ideal no existe. Te vas a tener que enfrentar a diferentes niveles de mediocridad. No es tu culpa, ni la suya. Todas las aplicaciones, por muy adecuadas que parezcan al principio, acabarán por desquiciarte y decepcionarte en aspectos que para ti son importantes.
2 / Las expectativas que suscita el software han arruinado nuestras vidas
Cargas con el peso de las expectativas hacia meros progamas de ordenador, que al final no son más que ceros y unos que terminan en una pantalla en blanco. Estás poseso por la seductora —y opresora— fantasía de que hay un programa de notas específico con el que estás destinado a estar toda la vida y el cual acabará con tus anhelos, será tu alma gemela, tu segundo cerebro, tu compañero de capturas, de historias, tu guardián de pensamientos que por ahora no tienen ningún sentido pero que a lo mejor algún día vuelves a retomar (si el servidor donde se guardan las notas en la nube no explota antes).
3 / Cuidado con esos vídeos de YouTube
Me refiero a esos vídeos de Youtube en los que alguien te enseña su sistema de gestión del conocimiento y su aplicación de notas y te parece que no han hecho otra cosa en cinco años que pensar qué sistema, qué floripondios, qué tipo de referencia de bloque van a usar para sentirse menos vacíos. Estos vídeos hacen todo lo posible para transmitirnos que con un poco de esfuerzo encontrarás tu sistema ideal e inmutable. Es una idea muy poderosa que va muy bien para ganar suscriptores, pero a ti no te servirá de mucho. El número de personas que están contentas con su herramienta de toma de notas a todos los niveles durante un período mayor de dos días es minúsculo. A estas almas afortunadas las podríamos reunir a todas sin problemas en la Torre del castillo árabe del peñón del Gibraltar. Es poco probable que tú y yo pertenezcamos a ese grupo, y no, tampoco nos va a tocar la lotería.
4 / Es normal que te sientas sola
Un enfoque algo más maduro sobre la idea de alcanzar a convivir con la aplicación de notas perfecta es entender que hay que dar el brazo a torcer. Para encontrar un programa que te satisfaga lo suficiente tienes que lograr que se dé la compatibilidad y no alrevés, no debe ser un prerrequisito. Conseguiremos convivir alegremente con nuestra aplicación de notas cuando dejemos de insistir en que comparta todas nuestras ideas estéticas, funcionalidades inventadas y opiniones políticas. Lo normal es que nos sintamos solos y abandonadas en nuestra aventura de tomar notas, desarrollar ideas y manejar conocimiento. No le pidas a una aplicación que resuelva los problemas del desamparo de tus ideas en su totalidad.
5 / Piensa que tú también eres difícil
Es fácil olvidar que el software está diseñado y ejecutado por personas igual de complejas e imperfectas que tú. Esta es tu oportunidad para reflexionar sobre aquello que hace que sea difícil convivir contigo (y con tus ideas). No porque seas un bicho raro, sino porque todos tenemos una serie de defectos y de carencias que se manifestarán en cuanto empecemos a convivir día sí, día también. Piensa dos veces antes de insultar y soltarle todo aquello que le gritas a tu aplicación de notas: «lenta, inútil, horrenda, ineficaz, incapaz, pazguata, vete a freír espárragos».
6 / Deja de buscar la aplicación perfecta
Deja de buscar la aplicación de notas perfecta y empieza a buscar desde esa perspectiva mucho más agradable y apetecible: busca una aplicación que sea lo suficientemente buena. No habrá ninguna ideal, pero eso no significa no tenga nada que ofrecerte. Ten en cuenta que lo que necesitas de ella vendrá también con un montón de cosas que ni necesitas ni quieres.
7 / Tanto la toma de notas en papel, en digital y el no tomar notas: todo es problemático
Tomar notas en papel no es una pérdida de tiempo: puedes tomártelo como un entretamiento para el espíritu de compromiso y gratitud que exige casarte con una aplicación de notas digital. Cuando tomamos notas en papel o incluso cuando no tomamos notas no debemos fijarnos en las notas digitales en detrimento de otras formas de tratar la información. Tanto el papel como el digital tienen sus aspectos positivos y sus espantos. No hay que idealizar ni la una ni la otra, sea cual sea tu caso.
Esta entrada es un guiño-guiño y adaptación de este vídeo de The School of Life. Muy recomendado su canal de Youtube y todo lo que hacen.
un buen plan 
Crudo y cierto.
Es un hecho que buscar la mejor app, mejor método, mejor plataforma para alcanzar nuestro sueño de las notas perfectas es una manera de procrastinar y evitar el trasfondo de las mismas, que es es.. Hacer las cosas. Nos bombardeamos con tanta información sobre este tema que parece imposible llegar a algo concreto; así como tú, he dedicado bastante tiempo (más del que debería) en poder tener notas, que a mi gusto, cumplan todos lo requerimientos para ser altamente útiles en un futuro; siempre termino estampado contra la pared al darme cuenta que no puedo lograrlo, siempre surge una nueva idea que al momento de intentar realizarla complica todo un proceso que previamente ya estaba estructurado. Mi obsesión con esto me ha llevado a pensar en desarrollar una aplicación que se enfoque exclusivamente en mis necesidades, un extremo bastante loco pero a eso me ha llevado esta perfección en notas.
Lo que he descubierto, que me ha ayudado, es tomar apuntes a la vieja escuela, «lápiz y papel» (lo pongo entre comillas porque a veces uso un iPad y un Apple Pencil, pero el concepto es parecido) así retenemos mejor la información que redactamos.
El segundo paso es utilizar una app de notas que se adapte a cualquier idea loca que tengamos, Notion podría parecer la mejor opción, pero si queremos llevarlo más lejos aún recomiendo Obsidian, la curva de aprendizaje es complicada pero una vez que te acostumbras el provecho que le puedes sacar es inimaginable.
Tal vez vuelva a caer de nuevo en una búsqueda sin fin de la mejor manera de hacer notas, pero mientras tanto esto me sirve y es cómodo.
Me encanta tu blog, sigue así ❤
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